Ya hemos hablado mucho sobre la definición y en qué consiste
el Asperger; en síntesis, es un trastorno del
desarrollo que se conoce poco y que está relacionado con el autismo, pero que
es difícil de notar a simple vista. A diferencia de los niños autistas, los
Asperger, tienen un vocabulario avanzado que los hace parecer más dotados que
discapacitados, sin embargo, socialmente, carecen de las habilidades más básicas.

La interacción para los niños con Asperger se vuelve
compleja, pues como vimos no comprenden de igual forma su entorno. Es por ello
que dedicamos esta entrada para compartirles una carta redactada por un joven
con Asperger dirigida a los padres de otros niños de su misma condición. En ella
expone seis ideas para ayudarles a educar a sus hijos. A continuación se
muestran los consejos:
Comprenda que rara vez hace algo con el propósito
de ser malo
Para nosotros muchas reglas son “ilógicas” o “contradictorias” (Ej: “decir
siempre la verdad” se contradice con “agradecer cualquier regalo aunque no te
guste”). cuando un niño con Asperger diga algo de forma honesta no lo castigue,
enséñele a expresar la honestidad de una forma menos hiriente para las demás
personas.
Muy difícil de intentar y/o lograr, pero es una gran herramienta para poder
lidiar con nosotros. Para una persona con Asperger el por qué de algo debe
tener una razón sustentable; decir “porque sí” se vuelve frustrante para
nosotros pues no da espacio para entender. Eso sí, debe enseñársele el punto
donde debe aprender a seguir órdenes primero y cuestionar después.
Las enseñanzas
morales que le dé cuando pequeño lo seguirán por siempre
Enséñele a respetar a los demás lo antes posible y sin miedo. Si mantiene una
línea moral el niño la seguirá de forma constante; lo importante es que usted
sea consecuente con esa misma línea y se comporte de acuerdo a la forma que
espera que el niño se comporte. Si usted ha de crear excepciones a ciertas
reglas explíquelas. Preocúpese de que los héroes de su hijo sigan el modelo que
usted desea enseñar (Superman y Spiderman son ejemplos de héroes nobles).
Identifique y saque
provecho a los intereses de su hijo/a
Los niños con Asperger rara vez son superdotados; lo que logran poseer es un
muy fuerte interés hacia ciertas materias o cosas volviéndose eruditos en
ciertas áreas. Este interés puede ser por algo específico (alguna especie de
animal, trenes, flores, computadoras), o por áreas bastante más amplias (la
biología, cultura general, expresiones artísticas, matemáticas en general). Lo
importante es conocer estos intereses y enfocar el progreso de su hijo en esas
áreas; si él o ella no se desempeña bien en otras, no lo prive de sus placeres
sino busque formas en que él entre a las áreas que menos le apetecen,
utilizando como puerta de entrada sus actividades favoritas.
Dele estructura,
rutina y orden, pero expóngalo a cosas nuevas de forma controlada y constante
Los niños Asperger gustan de la rutina, es agradable tener un orden y eso les
asegura una amplia alegría interior y un refugio ante el día a día. Proteja el
orden ya que le ayudará a que su hijo tenga un lugar donde pueda sentirse cómodo.
Es normal que rehuyan de las cosas nuevas, para nosotros la rutina es un
espacio seguro y lo nuevo es poco atractivo y hasta atemorizante. Hacer que se
enfrenten al mundo toma tiempo y requerirá que lo lleve fuera de la casa con
frecuencia. Si lo hace desde pequeño, le puede enseñar a tener paciencia hacia
los demás, interesarse por otras cosas y hasta hacer que se atreva a enfrentar
cosas que antes rehuía. Preocúpese de dar el ejemplo para que él vea que no está
solo en su aventura.
Dele mucho apoyo
emocional
El mundo es cruel para quienes no lo comprenden y la gente con Asperger sufre
cuando la dejan sola en el mundo. Para muchos Asperger las emociones son
extrañas y difíciles de controlar: ideas como el amor, religión, moral y odio
van más atadas al instinto que a la razón y con menor control sobre los
instintos, un Asperger reaccionará de formas no necesariamente agresivas, pero
si extremas ante eventos desconcertantes. El colegio será la barrera emocional
más fuerte que enfrentará su hijo pues los jóvenes de hoy rara vez respetan a
quien es distinto y algunos buscan formas de obtener placer del dolor ajeno.
Hable con su hijo de forma abierta acerca de cómo se siente con el mundo a su
alrededor, escúchelo sin miedo y busque qué herramientas le pueden ayudar a
afrontar los momentos difíciles de la educación. Si lo logra, le habrá dado las
bases vitales para que tenga una vida independiente y plena.
Esperamos les haya sido útil la información que les
compartimos; información valiosa que fue expuesta por una persona que comprende
en carne propia la situación por la que pasa una persona que padece el
trastorno.